Este objeto fálico se llama TOYPEDO: TOY, de juguete; PEDO, para completar TORPEDO... Todo un desafío al ingenio en la lengua de Shakespeare. Y en la de Cervantes no digamos.
"Torpedo submarino"... Esto es un puto vibrador de chino reconvertido en juguete y rebautizado en Changchun por el empleado aventajado en inglés... Hasta pedo se da uno cuenta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario