sábado, 26 de febrero de 2011

El milagro antigrasa

Los de Fairy tienen problemas de marketing, sin duda. Lanzan piedras contra su propio tejado.

 

"Puede durar hasta doce semanas", ponen... Ya te digo. Esto lo tengo yo en casa desde hace dos años.

viernes, 25 de febrero de 2011

Más falso que Juudash

Recuerdo que hace muchos años tuve una camiseta Addos y el logo eran las garras de Kelme pero sólo tres. Adidas puede ser una de las marcas más tuneadas de todos los tiempos, un clásico seguro.


Aquí como balbuceando...

 

aquí como en bielorruso...

 

aquí...

 

y por último, la firma que sirve de control de alcoholemia: si lees Adidas, estás confundido.

 

Pero os digo una cosa: qué más da no tener unas Nike...

 

o unas Converse...


o unas All Star...



si puedes tener unas Puma con suela Cnovesre.


También puedes lucir las zapatillas con unos vaqueros de los prestigiosos Docha y Cabanon, cuyos verdaderos nombres son Dos y Cachondos. Son griegos, creo.


O estos pantalones, que son ideales para andar por casa.


En cuanto a la tecnología, si quieres más que la DS de Nintendo, compráte algo cojonudo: la Ninetudo.


Pero no intentes buscar un distribuidor oficial de Caieion o algo así.


Pila, pilas. Penesamig, ¿penesamigos?
¿Penes/a/mi/G?, ¿a mi punto G?..


Este es buenísimo, Sonia: no sabes si compras unos auriculares, unos tampones o una mascarilla, y además al reves se lee vinos.


Y por último, el nember guan, la gorra para espiar a la selección española. Obsérvese el detalle del Mulhacén sobre el escudo en la visera.

viernes, 18 de febrero de 2011

Yo no soy tonto, soy chino

Hoy he hecho 700 km en coche para escuchar en directo una única frase, demoledora.

Y se ve que como se me ha quedado cara de tonto, lo siguiente ha sido ver este cartel de Media Markt.


Lo curioso es que en León, a ambos lados de la Avenida de los Antibióticos hay sendas vallas publicitarias.

La de Media Markt.

Y ésta.


Éstos sí que de tontos no tienen un pelo, al menos rizado; nos engañan como a chinos... Digo, al revés: los chinos nos engañan.

lunes, 14 de febrero de 2011

Tributo al tributo

¿Pero qué clase de homenaje es éste?


Oficialmente se llama Calle de la Recaudación y está en Villanueva del Pardillo.


Lo único que tengo claro es que Recaudación y Pardillo se complementan siempre.

martes, 1 de febrero de 2011

Sexo a los seis años

Mi hija tiene este libro tan chulo, que se llama El cuerpo humano y que le gusta mucho:


Os lo recomiendo. Tiene once mini historias y cuenta que el cerebro es como un ordenador, para qué sirven los huesos, los pulmones, el corazón, por qué nos dan ganas de hacer pis...


Y uno de los capítulos se llama ¿Cómo se hace un bebé? No Cómo nace un bebé o Qué es un bebé o De dónde viene un bebé. No, no: cómo se hace. Directo al meollo de la cuestión.


El texto está currado, porque contarle el tema a una personilla de seis años, y en quince líneas... Se relata con extremo realismo -infantil- la cuestión. Es más, la última frase de la introducción es demoledora. Explica las diferencias entre niñas y niños: "sobre todo se distinguen por tener unos órganos genitales diferentes".


Ahí están: los genitales. Aquí ya se ve claro que por cojones van a ser protagonistas para hacer un bebé. Esto lo ponen ellos así, hala, los genitales... Luego, cuando tu hija te pregunta qué son los genitales, pues ya le dices tú que el pito y el chichi... aunque su madre al chichi lo llama el culito de alante, lo cual es cuanto menos desconcertante incluso para un adulto.


"El papá y la mamá se quieren mucho y se abrazan, y de su unión se forma en la tripa de la madre una nueva personita...". Así de simple, aunque esta frase quizá haya podido llevar a criaturas de seis años a pensar, por ejemplo, que toda España estaba haciendo niños cuando ganamos el Mundial, además de resultarles inquietante que sus papás abracen a otros.

Es fantástico también cómo se presenta el parto a esta tierna edad. Se resume con un enigmático "sale", que, desde luego, tampoco ofrece lugar a dudas, porque el bebé, de una manera u otra, sale.

En definitiva, si todavía desconocéis cómo se hacen los niños, ya sabéis: quererse mucho y abrazarse nunca falla.