lunes, 3 de enero de 2011

El amigo americano

Mi único seguidor en mi recién estrenado y voluntariamente ignorado tuiter es nada menos que Delfín Quishpe, así que hoy le he pedido amistad en el feisbuc. Con dos cojones.

Bueno, le he pedido amistad a él o a su prima, claro, que en el feisbuc nunca se sabe con los personajes mundialmente conocidos como éste.

En caso de aceptarme, Delfín sería mi amigo feisbuquiano número 131, pero eso no le convertiría en un capicúa, pues él es un quechua desde que su madre lo parió, hace 33 años.

Delfín es uno de esos pocos ecuatorianos que no vive en la ciudad más poblada de Ecuador, Guayaquil; ni en la segunda, Quito; ni en la tercera, Madrid. Delfín sigue fiel al lugar donde nació, Guamote; quizá por eso sea guay su mote: Delfín hasta el fin.


Este hombre se define como "cantautor de tecno-folclore-andino" en su feisbuc, donde también apunta el porqué de su nombre: "Delfín es mi nombre verdadero. Mis padres me pusieron de esta forma ya que era el último hijo, el del fín...".

Así pues, menos mal que tras él no llegó otro hermanito, porque igual le hubieran puesto Deldescuido, Delaccidente o incluso Delagomarrota, al tratarse de una familia india.

EXPLOSIÓN MUSICAL

Si los de Camela alcanzaron la popularidad vendiendo sus casetes en gasolineras, Delfín se hizo mundialmente conocido tras lanzar en YouTube el que hasta hoy es su tema más exitoso, Torres Gemelas; en 2006.

Sí, lo de las Torres Gemelas fue en 2001, pero este compositor metódico justifica así su retraso: "La música ya tuve en el 2002, la letra desde el 2004 hasta el 2005". No aclara qué hizo en 2003, quizá se tomó un año sabático, como Madonna.

El caso es que Delfín hasta el fin necesitó más de cinco años para parir esto, que otros hubiesen finiquitado en diez minutos previa ingesta de la cantidad necesaria de alcohol:


Eso sí, la cansionsita de este artista finito tiene seis millones y medio de visitas en YouTube, que ya las quisiera para él el miembro viril de Leonardo Dantés, que no llega a las 150.000.

Sólo dos semanas después de colgar Torres Gemelas el vídeo ya tenía 250.000 visitas. Sin duda, eso animó a Delfín a seguir componiendo superventas sin fin, como esta canción de amor en la que desarrolla su deseo de fugarse a España con una hembra vecina:


Y gracias al éxito de Torres Gemelas el arte de Delfín Quishpe traspasó fronteras rápidamente. Bueno, la del Perú, que pillaba ahí mismo; y propició que en el país vecino conociera a dos colegas de profesión: 

AMIGAS DEL PERÚ

1- La pequeña Wendy Sulca, una niña que a los ocho años tan pronto pasaba de querer tomar leche en su envase original...


...a pedir a gritos ponerse gocha a cerveza, con cameos de borrachos incluidos en el vídeo:


2- La Tigresa del Oriente, un bicho de cuidado, que comparte la devoción de Wendy por la cerveza...


...pero que también le canta, por ejemplo, a los animalillos de su entorno:


Delfín, Wendy y la Tigresa se dieron cuenta pronto de que haciendo un trío arrasarían.


Por eso, desde hace tiempo comparten vídeos y escenarios, y han obtenido su mayor éxito con su En tus tierras bailaré, un homenaje a Israel desde el Perú y la ignorancia:


En fin, hasta el fin; ya desvelaré si Delfín me acepta como amigo también en el feisbuc.

O su prima.

Y a los demás que les zurzan.

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